MSC Seaview, Disfruta de una experiencia única en el mar
El nuevo MSC Seaview es un barco que sorprenderá por igual tanto a cruceristas experimentados como a primerizos. Es un derroche de elegancia, brillo y diseño italiano, pero sobre todo, rompe con todos los moldes establecidos en los cruceros por su distribución, tanto en el interior como en el exterior. El astillero italiano Fincantieri, donde se ha construido, situó la sala de motores en el centro para ganar estabilidad, y eso cambia por completo la configuración habitual de los espacios. Además, un gran paseo exterior rodea toda la nave por encima de los botes salvavidas, terminando en popa en una amplia terraza con piscina, ideal para relajarse viendo la estela del barco en el mar.
El MSC Seaview es un barco diseñado para aprovechar al máximo el sol, por eso dos de sus piscinas no tienen obstáculos a su alrededor ni cubiertas por encima, y la piscina cubierta, cuando se abre el techo retráctil, queda perfectamente expuesta a los rayos solares, aunque por supuesto hay zonas de sombra para quien lo prefiera. El ocio al aire libre es otra de sus bazas: varios toboganes acuáticos proporcionan adrenalina tanto a niños como a mayores, y dos tirolinas recorren el tercio de popa con excelentes vistas. Por si no fuese suficiente, podemos caminar sobre un puente de cristal a 40 metros sobre el mar, y ya en el interior, hay diversiones como el Cine 4D, el simulador de Formula 1 o dos pistas de bolos. Pero no todo va a ser adrenalina, el MSC Aurea Spa es un auténtico oasis de paz y relax, con una tentadora sala termal de luz suave y cabinas que van desde la tradicional sauna a la sala de sales minerales, pasando por baño turco, sala de nieve y más.
La gastronomía es importantísima cuando estamos de vacaciones, y en el MSC Seaview las opciones son inagotables. Para empezar cuenta con dos variados bufetes, uno en la cubierta 16 y otro en la 8, así como dos restaurantes principales. A partir de ahí, podemos dejarnos tentar por la extraordinaria oferta de restaurantes de pago como el nuevo Ocean Cay del chef estrella Michelin Ramón Freixa, con unas ostras en salsa que quitan el sentido, o el Butcher´s Cut, para los amantes de chuletones. Y si lo que nos gusta es la cocina asiática, encontraremos hasta tres opciones avaladas por el chef Roy Yamaguchi: el Teppanyaki, la barra de Sushi y el restaurante pan-asiático. Todo ello articulado en torno al Wine & Cocktails Bar que es un espacio de auténtico lujo donde tomar el aperitivo con estilo.
Otra estancia impresionante es el atrio central, donde no podían faltar las míticas escaleras de Swarovski que ya son un emblema de los barcos MSC Cruceros. No obstante, el tamaño de este atrio supera con creces lo visto hasta el momento, e incorpora en su frontal tres pantallas de alta definición y un pequeño escenario para música en vivo sobre la barra del bar. Los cromados, las cristaleras y una serie de áreas decoradas en estilo futurista a su alrededor dotan a este atrio de una espectacularidad pocas veces vista en barcos de cruceros.
Los pasajeros más selectos pueden reservar una suite en el MSC Yatch Club, lo que le da acceso a una serie de áreas privadas que en el MSC Seaview se han visto muy mejoradas y ampliadas. La zona exterior de piscina privada ha ganado mucho tamaño, y el salón Top Sail Lounge se fusiona ahora con un restaurante en el piso superior que comparte las impresionantes vistas a través de la cristalera frontal.
Hay muchos más espacios por comentar, como el estupendo bar deportivo o los clubs infantiles, la discoteca semi-exterior, el teatro, o el gran salón Haven Lounge, pero no quiero desvelar todos los secretos de este magnífico barco que se convertirá, desde ya, en una referencia en el Mediterráneo. Pasará el verano 2018 en el Mediterráneo con embarque en Barcelona, y luego, en Noviembre, partirá buscando el sol de Brasil donde estará haciendo cruceros con embarque en Santos hasta marzo de 2019, cuando regresará al Mediterráneo nuevamente.