Crucero Nueva Zelanda, Polinesia Francesa a bordo del Ovation of the Seas desde Sydney (Australia)

Sydney (Australia)

Aunque Sídney es una de las ciudades más grandes del mundo, descubrirás que la mayoría de las cosas que quieres ver y hacer se encuentran alrededor de uno de los puertos más bellos jamás visto. Y lo primero que querrás hacer es visitar la Opera House de Sídney. Con su sensacional diseño de velas blancas, es uno de los edificios que se reconocen con mayor facilidad. Luego dirígete al casi igualmente conocido puente Harbour Bridge de Sídney para tomar algunas fotografías. En el centro de la ciudad encontrarás una gran cantidad de restaurantes de primera categoría, tiendas, entretenimiento y museos. Y si estás ahí en verano, ningún viaje a Sídney está completo sin un poco de sol y surf en una de las espectaculares playas de la ciudad.

Auckland (Nueva Zelanda)

Auckland es mundialmente conocida como la ciudad de los veleros. Mitad marina, mitad urbana. Auckland está ubicada en una delgada faja de tierra rodeada por el océano pacifico y está perfectamente situada para practicar deportes acuáticos y velerismo en sus hermosos puertos y bahías. Auckland es una ciudad muy cosmopolita, tiene una atractiva vida nocturna, moda y artes, además es el lugar ideal para iniciar tu recorrido por Nueva Zelandia. Una de las grandes ventajas de Auckland es su cercanía a todo. A sólo 45 minutos, se puede estar en una silenciosa y placentera playa; o explorando el bosque nativo; o en una isla subtropical, todo depende de la dirección que tomes.

Raiatea (Polinesia Francesa)

Es la mayor de las islas de Sotavento. Se llega en avión desde Tahití. Uturoa es su población principal. En un día es posible recorrer toda la isla. Un lugar de gran belleza es la bahía de Faaroa, en cuyas riberas crecen plantaciones de vainilla. La bahía de Opoa y el marae de Taputapuatea son dos de sus máximos atractivos.

Papeete (Polinesia Francesa)

Tahití es la mayor de las islas de la Polinesia. Su población se concentra principalmente en Papeete. Los amantes de las compras pueden disfrutar de sus elegantes tiendas, de su mercado municipal y de la zona del puerto. La ciudad se caracteriza por su mezcla de culturas francesa, polinesia y china. Sus suburbios se expanden a lo largo de kilómetros desde su costa hasta las montañas. El interior de la isla ofrece la espléndida e inolvidable oportunidad de practicar el senderismo o realizar excursiones en 4x4 y distrutar de sus impresionantes cascadas, sus parajes arqueológicos, grutas y mucho más. Tahití es accesible por aire desde la mayor parte del mundo. Todo el tráfico aéreo internacional llega a través del aeropuerto de Faa Papeete. Hay disponibilidad de taxis, alquiler de coches, motos y bicicletas, así como un servicio local de autobús en los alrededores de Papeete.

Moorea (Polinesia Francesa)

El nombre de Moorea quiere decir 'lagarto dorado'. Una leyenda explica que un lagarto gigante partió con la cola las dos bahías al norte. Estas bahías son las de Opunohu y la de Cook o Paopao. Curiosamente James Cook en 1777, ancló en la bahía de Opunohu y no a la de Paopao. El mirador de Belvedere (o Roto Nui) es un punto de atracción con espléndidas vistas a las dos bahías. Esta isla es uno de los principales destinos turísticos de la Polinesia Francesa, existiendo en la misma varios Resorts de lujo que permiten a sus visitantes disfutar de su magnífica y bella laguna.

Honolulu (Hawai)

A la isla de Hawái se le llama la Gran Isla, y con razón. Es más del doble de grande que todas las demás islas hawaianas juntas. Y está absolutamente cubierta con frondosa naturaleza, desde los escarpados volcanes hasta las cascadas y los bosques lluviosos. Es el hogar de los cráteres humeantes y ríos de lava secos del Parque Nacional de los Volcanes.

Honolulu (Hawai)

A la isla de Hawái se le llama la Gran Isla, y con razón. Es más del doble de grande que todas las demás islas hawaianas juntas. Y está absolutamente cubierta con frondosa naturaleza, desde los escarpados volcanes hasta las cascadas y los bosques lluviosos. Es el hogar de los cráteres humeantes y ríos de lava secos del Parque Nacional de los Volcanes.