Muy buena relación calidad/precio. Muy buena calidad de la comida, tanto bufet como restaurantes y atención de los camareros (ratio tripulación/clientes). Barco en perfecto estado, elegante aunque algo sobrio. Como la mayoría del pasaje es norteamericano, la zona de piscinas a partir de las seis de la tarde, hora en la que se van a cenar, queda a la entera disposición de los que cenamos más tarde.
Algo que ya conocíamos, la mayoría de los clientes son americanos (y con una edad próxima a la jubilación o más) y todo es en inglés (en castellano solamente se comunica los mensajes de gran importancia, y algunas cartas del restaurante). Como parte del personal habla español, y esto ayuda. El entretenimiento también está pensado para este perfil de personas.. Poca fiesta por la noche y a la que asisten pocos clientes, españoles y poco más.