Recife

Metrópolis de la pluralidad

Atravesada por los ríos Capibaribe y Berberibe, Recife es una hermosa y moderna metrópoli costera con numerosos puentes, anchas avenidas, grandes edificios y una intensa vida social y comercial. Cuenta con casi 2 millones de habitantes y es una ciudad muy agradable, con una temperatura media anual de 26ºC. La ciudad es obra de los flamencos, que contribuyeron sobre todo al trazado de los puentes. La presencia de los portugueses se revela en la arquitectura de las iglesias, de los fuertes y de las construcciones antiguas. Los africanos aportaron el maracatu, danza y música basadas en la percusión.

 

Es una de principales ciudades y puertos del noreste, con una tradición de música y danza que la han hecho famosa en todo el país. El centro, rodeado de agua por todos los lados, es bullicioso y animado, mientras que el más tranquilo Recife Antigo posee pintorescos edificios coloniales.

 

La mezcla de culturas hizo de Recife una cuna de manifestaciones artísticas singulares, como el Manguebeat, movimiento contracultura que mezcla el ritmo regional del maracatu con rock, hip-hop y música electrónica. La arquitectura también es una atracción aparte, convirtiendo la propia ciudad en una obra de arte para ser apreciado. Cuenta con una infraestructura completa, con hoteles de todos los tamaños, y restaurantes que ofrecen el sabor inigualable de los platos pernambucanos, a base de coco, anacardo, mariscos y harina de mandioca.

 

Muchos viajeros también se alojan en Boa Viagem, un próspero barrio de las afueras que da a una larga playa de arenas doradas, o en Olinda, ciudad hermana de Recife y más pequeña, declarada Património de la Humanidad por la UNESCO.

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