Reethi Beach Resort

“Vacaciones en el Paraíso!”

Estuvimos alojados 10 noches en las Water Villas de este hotel y la verdad es que la experiencia ha sido espectacular! Evidentemente hay muchísimos mejores Resorts en Maldivas, pero a precios prohibitivos. La Villa cumple con creces, tanto por espacio, comodidades y sobretodo por unas vistas incr... Más

Estuvimos alojados 10 noches en las Water Villas de este hotel y la verdad es que la experiencia ha sido espectacular! Evidentemente hay muchísimos mejores Resorts en Maldivas, pero a precios prohibitivos. La Villa cumple con creces, tanto por espacio, comodidades y sobretodo por unas vistas increíbles al mar, con su acceso directo desde la terraza, ofreciendo comodidad y privacidad. Las instalaciones bonitas y bien cuidadas. Teníamos pensión completa, así que sólo teníamos que pagar las bebidas (tenedlo muy presente, porque no tenéis opciones para comer ni comprar fuera del propio Resort). Las actividades acuáticas las lleva una empresa a parte, Oceans Fanatics Maldivas, gente simpática y dispuesta a ayudar en todo (no os podéis ir sin hacer snorkel en Hanifaru, algo alucinante). En general el personal es simpático y amable. La isla es muy pequeñita y la cruzas a pie en 15 min tranquilamente. Los amaneceres y puestas de sol increibles! Resort muy tranquilo, olvidaros de fiesta aquí. Si vas a descansar y ver pasar el tiempo rodeado de una increíble fauna, Reethi Beach cumple con creces! Sin duda alguna volvería.

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“Todo perfecto”

Unas estupendas vacaciones. Habitación muy cómoda, la playa preciosa y el arrecife lleno de peces, alguna tortuga, etc. Si hay que poner algún pero sería la comida, con muchas especias y algo picante en algunos casos. Muy buena atención por parte de todo el servicio y del centro de buceo. Repe... Más

Unas estupendas vacaciones. Habitación muy cómoda, la playa preciosa y el arrecife lleno de peces, alguna tortuga, etc. Si hay que poner algún pero sería la comida, con muchas especias y algo picante en algunos casos. Muy buena atención por parte de todo el servicio y del centro de buceo. Repetiremos.

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“Desilusión, masificado, artificial”

Empezare por lo bueno. El personal se esfuerza hasta el infinito por hacer que tu estancia sea agradable, en este sentido se ganaron nuestro afecto. Optamos por un todo incluido y la comida era abundante y variada lo cual no debe ser nada fácil habida cuenta la ubicación. El funcionamiento es com... Más

Empezare por lo bueno. El personal se esfuerza hasta el infinito por hacer que tu estancia sea agradable, en este sentido se ganaron nuestro afecto. Optamos por un todo incluido y la comida era abundante y variada lo cual no debe ser nada fácil habida cuenta la ubicación. El funcionamiento es como que de reloj Suizo, todo perfectamente supervisado intentando buscar el agrado del cliente. En ocasiones todo se volvía excesivo, decoración navideña con papá Noel por todos lados y una iluminación con miles y miles de bombillas hasta en el espejo del agua. Las habitaciones están mal mantenidas, hay demasiados elementos que deberían cambiarse. La música, la banda sonora del local no es que sea mala es que es peor. La conciencia ecológica es nula, la isla es de una absoluta artificialidad, se extrae arena del fondo no solo para rellenar las calles con arena más bonita, también se regeneran las playas… que en menos de quince días desaparecen, yo no hay arrecife barrera, no hay contención aunque se intenta crear arrecife artificial con bolsones y sacos textiles mal rellenados con cemento y colocados a saber con qué criterio. Estuvimos esos quince días y tuvimos tubos y playa al llegar y tubos sin playa al marchar. No queda apenas arrecife costero que retenga la arena, el poco arrecife que queda es constantemente sometido a agresión con esa política de regeneración de playa y calles y por la mucha gente que lo pisotea a pesar de los carteles cool que piden que no se pise. La creación de pantalanes anclados de cualquier forma, con rezones que también agreden el coral, también duele a la vista. Muy masificado, sobreexplotado, no es sostenible. El agua se enturbia gracias a todo ese proceder y el poco arrecife que aún mantiene la isla tiene los días contados. Lo mejor el spa atendido por una colonia de balinesas que te hacen sentir como en el cielo, los masajes y tratamientos son sobresalientes y muy recomendables. Seguro que en su día esto fue una maravilla pero fenómenos climatológicos globales y un mal actuar a nivel local se están cargando el entorno. Ni de lejos cumplió con las expectativas a pesar del magnífico afán del personal por hacer que tu estancia sea agradable. Aún con todas estuvimos felices principalmente gracias a tres cosas: la actitud del personal propio del resort, nuestra predisposición a pasarlo bien en cualquier circunstancia y por la distancia, mucha mucha distancia al frío pandémico europeo. Como veterano del buceo y a pesar de todo hice junto a mi hija más de veinte inmersiones, debajo del agua soy feliz, ya digo que tengo miles de inmersiones, solo estar debajo me hace feliz pero como lugar de buceo Maldivas ha sido una absoluta desilusión, está todo arrasado y no solo por fenómenos globales, lo que allí he visto no es sostenible. Si vas pensando en buceo no te merece la pena. Si vas buscando un resort donde te den todo hecho pues no sé qué decir, yo no buscaba eso. Al final dejamos Maldivas con un sabor agridulce, mucha desilusión, y un inmenso afecto hacia algunas personas que allí conocimos y que contribuyeron a salvar lo que parecía ser un absoluto fracaso.

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“Hotel normal”

Es un hotel normal, no con los lujos que uno imagina en este destino. Antes de ir asesorarse bien hacía que lugar de la playa dan las habitaciones. Como ejemplo diré que la zona de playa que correspondía a mi habitación esto es donde estaban las reposeras o tumbonas con el número de habitación, d... Más

Es un hotel normal, no con los lujos que uno imagina en este destino. Antes de ir asesorarse bien hacía que lugar de la playa dan las habitaciones. Como ejemplo diré que la zona de playa que correspondía a mi habitación esto es donde estaban las reposeras o tumbonas con el número de habitación, daba al embarcadero el agua y la arena no eran las mejores y el olor a gasolina muy molesto. Tenía que ir a bañarme al otro lado y mendigar una silla donde tomar sol , si mal no recuerdo las mejores estancias estaban entre la numero 100 y 125. Con respecto a la comida era buena aunque con poca variedad.

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